Me siento como si estuviera en Los Alpes Suizos. Hagan de cuenta que un alud de nieve nos sorprendió y sepultó todo nuestro campamento. Estamos bien, vivitos y coleando, pero sin saber nada más de otros. Con todo, se empieza a ver una lucecita entre la nieve y alcanzamos a oír ciertos murmullos que a El Publicista, en su calidad del heraldo de este gremio le toca ir y averiguar qué onda con los amigos.
Con tal propósito en mente entrevistamos el pasado 09/12/2020 a Manuel Techera, mero mero bongonsero de M&C Saatchilanga quien, a tres años de fundada su agencia, nos confiesa que el 2020 ha sido el mejor de su historia ya que no han parado de trabajar él y sus otros 16 colaboradores… “Si bien hemos tenido que aprender del día a día: los planes a mediano y a largo plazo han desaparecido por el momento y ahora nos encontramos concentrados en el aquí y el ahora”, nos comenta el propio Manolo.
Y añade: “con esa filosofía y en pie de lucha hemos logrado que el 2020 sea el mejor año de nuestra corta vida y que ya el 65% de nuestros proyectos sean de carácter digital. Y es que el cliente supone que lo digital le va a costar más barato, pero no siempre es así: cuando está bien hecho un trabajo de este tipo cuesta bastante”.
Como para estar a tono con su arresto domiciliario, el buen Manolo luce una muy tupida barba blanca, que si fuera más larga lo haría lucir como a Santa Claus. Y se despide de nosotros diciendo: “Nosotros incluso crecimos en este año. Empezamos siendo diez y seis y ahora somos 17. Contratamos a un muchacho especialista en Youtube, a quien ni siquiera conozco en persona, todo lo hicimos de forma virtual. Ello te indica cómo hemos cambiado”.
Y nosotros nos despedimos de Manolo deseándole la mejor de las suertes, cuya agencia participa por estos días en un pitch por una cuenta de coches: otro ejemplo de cómo han cambiado las cosas en el mundo publicitario. Antes, cuando las agencias transnacionales dominaban al mercado, a las agencias nacionales no las dejaban ni siquiera acercarse a esos anunciantes. Y es que lo que pasa, ahora, es que ahí está el talento.
